24 de agosto de 2013

Pequeña simpatía


Ayer en la parada de un colectivo esperaba, melancólica y entusiasmada, fumando. 

Una nena me miró en detalle un rato, de los pies hasta los ojos, fijos. Nos sonreímos.


Le dijo a su mamá algo que no escuché. La mujer se la vuelta y me comenta: “dice que es una lástima que una chica tan bonita fume”.