1 de mayo de 2012

No hay pruebas de que exista vida después de la muerte




Y verte ir caminando con el frío que te encoge los hombros ligeramente abrigados, como una derrota a cuestas, la vida y todo el peso del universo en tus hombros. Mi sangre, parte de mi lucha, cagate a trompadas con la vida, que duele pero es sanador. Que la tormenta de arena metafísica te vuele la cabeza, pero bien, con energía, con ganas de ponerle el pecho, de sonreír, aceptar impronta y arrancar de nuevo.
Que lo importante no es tener fé, sino fuerza.

PD: Y escuchá Pez.

2 comentarios:

Eclipse dijo...

hay que encontrar maneras de darles cachetadas y sacudidas metafóricas.
hay.
tené fuerza, vos también!

Eclipse dijo...

te respondí en mi blog, pero te lo digo acá: gracias por las cachetadas, a veces vienen bien ;)
quiérote