24 de junio de 2008

Despiole Generacional.

Tengo abuelos que son lo mejor, debería extrañarlos menos y visitarlos más.

Hablando de abuelos en forma universal, y conociendo ajenos, puedo marcar una generalidad: son dulces, cuentan buenas historias y cocinan riquísimo. Y sobre esto último me interesa reflexionar.

No sé si será la edad o las costumbres que adquirieron pero TODOS LOS ABUELOS, sin distinción de género, cocinan bien. Cualquier nieto recuerda con nostalgia algún plato que decora con colores su niñez. Los padres quizá también tienen cualidades, pero nada se compara con los primeros.

Las costumbre culinarias varían y evolucionan, o involucionan, juntos con la tecnología. ¿Qué opinarán los hijos de nuestra generación? ¿Qué opinarán los nietos de nuestra generación? Puré instantáneo, sopas en sobres, ensaladas y guisos en lata, salsas preparadas, sabores en cubos, y lo que el tiempo sume para restar complicaciones en este mundo posmoderno donde predomina lo instantáneo y simultáneo.

Somos los hijos del progreso en pos de la inutilidad, que el futuro se apiade de nosotros (?).

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